Grandes especiales de V1brraXX10nes"La música de la posguerra"
Rock Sureño, el regreso a las raíces.-
Capítulo I
Los antecedentes
El sur de los Estados Unidos siempre ha tenido características propias que lo diferencian del resto de la federación, no necesariamente representada por una línea divisoria norte-sur, pues, en esta diversidad, no son la ubicación geográfica ni el proceso de secesión los elementos definitorios de esos linderos, sino, junto a estos, una serie de rasgos, quizá, más importantes, que ayudaron a la formación de maneras de pensar y actuar totalmente opuestas. El norte era multirracial, liberal, industrializado y humanista, mientras el sur era esclavista, conservador, agrario y materialista, lo cual desembocaría en fuertes enfrentamientos en lo político, social y cultural, lo cual parece ser, en el sur, una historia sin fin.
Solo a título enunciativo, tres de los grandes eventos que han marcado al sur de los Estados Unidos fueron: la Guerra de Secesión, la liberación de los esclavos, esta, íntimamente ligada a la primera y la lucha por los derechos civiles de los negros, en la década de los sesenta del siglo XX, la cual tuvo un punto de inflexión en el año 1968, con el asesinato de Martin Luther King y la vigencia de la Ley de Derechos Civiles, la cual había sido aprobada en 1964. Este cambio de dirección traería consecuencias significativas en el quehacer político, social y cultural, tanto para los blancos como para los negros.
Nuevamente, sin pretender ser limitativo ni simplista, cada período histórico, producto de las consecuencias culturales, ha tenido una expresión musical que lo defina, v.g., la liberación de los esclavos impulsó el surgimiento y evolución del blues, a partir de los gritos primarios y cantos de trabajos que el esclavo de las plantaciones utilizaba, y que entonces, al convertirse en liberto, mezclado con instrumentos europeos o artesanales, muy rústicos, era lo único que le quedaba, para intentar sobrevivir fuera de las haciendas algodoneras.
La Segunda Guerra Mundial, a pesar de sus consecuencias devastadoras para cualquier forma de arte, se desarrolló bajo la música de las grandes orquestas o big bands, la evolución del jazz originario de Nueva Orleáns, interpretado por solistas y virtuosos, ahora reemplazados colectivamente por un grupo, lo cual dio nacimiento a un estilo muy particular, pues, mientras en Nueva Orleáns el jazz del solista, generalmente negro, criollo o liberto, era utilizado como música de fondo en los burdeles, para beber o jugar, ahora, la big band, generalmente formada por músicos blancos, apropiados de la música del negro, tocaba para que las personas, muchas mujeres abandonadas por sus esposos, quienes luchaban en la guerra, bailaran, en procura de distraer su soledad, tal como lo refleja el título "in the mood" (tener fuerte deseo por algo).
Cuando llega la posguerra, formalmente en abril de 1945, con el fin de los nazis, pero materialmente en septiembre de ese año, con la rendición de Japón, la apertura del arte, las heridas y el luto de la guerra, las cicatrices y los recuerdos imborrables, marcarán a los hijos de la posguerra. Aún fresco el olor de la pólvora y sin recoger los escombros de los bombardeos de la conflagración anterior, se inicia la Guerra de Corea, que duraría entre 1950-1953, desarrollándose bajo la música del incipiente rocanrol, mezcla de blues, hillbilly (música montañesa) y country (música de los vaqueros), la misma mezcla que utilizaría décadas después el rock sureño, pero en diferentes proporciones y con distintas intenciones. como veremos, pues, el rocanrol, como las big bands, buscaba hacer bailar a la gente. El rocanrol, como música, no como etiqueta, no nació en 1955 ni con Elvis Presley ni con Bill Haley and His Comets. Nació antes, pero los blancos, nuevamente, se apoderan de la música que fue desarrollando el negro, al margen de las big bands y, cuando esta empezó a sonar aburrida o fuera de lugar en la posguerra, entonces los solistas blancos tienen que reinventarse, utilizando para ello la música del solista negro. Esta historia pertenece a mi libro "Música Negra", por lo que no pretendo detenerme en ella. Lo que finalmente sería calificado como rocanrol comenzó a gestarse con el nacimiento de la sexta década (años 50) y uno de sus padres fundadores fue Big Joe Turner, otro de los grandes expoliados por los músicos blancos, fundamentalmente por Bill Haley.
En forma paralela a la Guerra de Vietnam, internamente, en los Estados Unidos, se desarrolla la lucha o movimiento por los derechos civiles, observándose dos períodos: uno, entre 1960-1964, liderado por Malcolm X y los musulmanes negros, en varias sectas, muy politizado, de ideología marxista y supremacistas negros, que terminó con el asesinato de Malcolm X, en 1964; el otro, liderado por Martin Luther King, apolítico, cristiano y de naturaleza pacifista, pero que termina igualmente con el asesinato del pastor King, en 1968. Este segundo período, no obstante, fue políticamente más complejo, pues, además del movimiento de King, surgen otros, como los Panteras Negras y el Black Power, de naturaleza marxista y creyentes de la vía violenta para tomar el poder, actuando muchas veces como guerrilleros urbanos. La banda sonora de ambos períodos fue muy particular, pero, en términos generales, representada por el soul, género surgido como sincretismo entre el blues, el jazz, el góspel y los spirituals, estos dos últimos, de naturaleza religiosa en las comunidades negras. La música soul proclama el orgullo de ser negro, pero, al mismo tiempo, es un pliego de denuncias y contrastes entre los blancos y los negros, creando mayores divisiones en la sociedad, convirtiéndose en el gran generador de los himnos de las luchas, escapándose de la esfera de la pura diversión, a diferencia de cualquiera de las otras bandas sonoras de los hechos previamente citados. Esto también es objeto de un estudio detallado, en mi libro Música Negra.
Capítulo II
Rock Sureño, nacimiento, causas y consecuencias.
El rock sureño, considerado como un proceso progresivo racial- y políticamente, más que un simple género musical, representó la respuesta que dio el sur de los Estados Unidos post derechos civiles, buscando reconciliar las posiciones enfrentadas, al menos en dos aspectos fundamentales: mantener el orgullo del legado sureño, menos en lo racial, en lo que había que ser progresivo, sin quedarse, retrógradamente, defendiendo la discriminación racial que, a fin de cuentas, era la peor cara del esclavismo. Para ello, recurrieron a la música, buscando integrar la música más representativa del negro pobre sureño, del blanco pobre del centro y del vaquero tradicional del oeste, la misma mezcla musical que utilizó en sus orígenes el rocanrol, pero, en este caso, en diferentes proporciones y con otras intenciones. En términos simples, el rock sureño respondió a los cambios políticos y sociales en el sur, como consecuencia del movimiento de los derechos civiles, siendo, al mismo tiempo, una reflexión y una respuesta ante el "american way of life" y el "american dream", es decir, la forma de vida americana y el sueño americano, del cual solo disfrutaban los blancos, y que, entonces, a partir de 1968, forzosamente tendrían que convertirse en "changing way of life", una forma de vida cambiante, transformadora, inclusiva, unificadora, donde el gentilicio fuese uno solo e identificara a todos: sureño, no negro ni blanco. No era fácil la tarea, no obstante, pero era inevitable e impostergable. "A pluribus unum" (De muchos, uno) fue el lema fundacional de los Estados Unidos y era necesario rescatar ese orgullo.
Había que responder algunas preguntas. ¿Qué significaba ser un sureño? Y, basándose en esa respuesta, ¿Qué debía ser entonces la música del sur de los Estados Unidos? La respuesta la tenían los hijos de la posguerra y ellos no conocían otro lenguaje, sino el del rocanrol y el rock. No podían seguir respondiendo con el soul, por ser una música segregacionista y supremacista, a la vista de esa nueva forma de vida unificadora e inclusiva. Planteado así, el rock sureño es una paradoja entre dos formas de identidad histórica, lo cual, inevitablemente habría de causar muchas tensiones, pues exigía a todos reexaminar muchas tradiciones. Musicalmente, no fue fortuito que el rock sureño surgiera a partir de los mismos elementos del rocanrol, pues este nació en el sur. En cierta ocasión dijo Gregg Allman que "rock sureño" es un pleonasmo o redundante, como decir "rock rock", pues el rock es sureño. Sin discutir tal afirmación, pues es discutible, el rock sureño es una paradoja y un híbrido, en la forma y en el fondo, en sus medios y en sus fines, surgido en 1969, con el primer álbum de The Allman Brothers Band, sus padres fundadores, y cuya preeminencia se hizo sentir hasta 1977, cuando ocurrió el accidente aéreo donde murieron varios miembros de Lynyrd Skynyrd , ambos grupos de Jacksonville, en la parte noreste de Florida, un estado lleno de contradicciones históricas, culturales y, sobre todo, musicales, que jugaría papel fundamental en el desarrollo del rock sureño.
Si a algún grupo le correspondía ser "padres del rock sureño", no iba a ser otro, sino uno donde estuviera Duane Allman, pues, siendo blanco, era un guitarrista cargado de experiencia en el mundo de la música soul y del blues, destacando su trabajo con Wilson Pickett y Aretha Franklin, Clarence Carter, King Curtis, Percy Sledge, Otis Rush y Doris Duke, entre muchos otros grandes nombres. Ya en su primer álbum, The Allman Brothers Band interpretan algunos temas clásicos del blues, como este de Muddy Waters.
Sin embargo, junto a estos blues estándares, aparecen sus primeros temas, la razón de su existencia: músicos jóvenes blancos haciendo rock sureño, con sus propósitos y metas, redefiniendo la nueva identidad sureña, blanca y masculina, mostrando ideales racial- y políticamente progresivos, reconociendo los errores del pasado, no rehuyendo hablar sobre ellos, como lo hicieron en el tema God Rest His Soul, del álbum Dreams, en el cual describen el asesinato de Martin Luther King, pero sin mencionar su nombre. Desde el mismo primer álbum de todo el movimiento, la escena quedó plasmada, pero también empiezan a ensayar con elementos de jazz y hacer zapadas, como en el tema Dream. Otra pieza de colección en el rock sureño.
El rock sureño está fundamentado en tres elementos: política, historia y música, donde los tres convergen en uno solo, lo racial, determinante de la historia, desencadenante de la política y la quintaesencia de la música de la posguerra, la música negra. El rock sureño, sin llevar la etiqueta de música de protesta, es esencialmente político, mucho más que el soul o cualquier otro género, donde lo social y lo racial se enfrentan sin disimulos ni eufemismos, preconizando un regreso a las raíces del rocanrol, pero como conciencia propia de lo sureño, no solo de la raza negra, sin que tal intención quede tácita ni sobreentendida, sino expresada, directa, desde los propios títulos de los temas. Y, más allá de esto, la simbología, como el uso de la bandera confederada, o referencias como Dixie o Dixieland, el nombre que se da, colectivamente, a todo el sur de los Estados Unidos, particularmente aquellos que participaron en la formación de los Estados Confederados.
Durante la era Duane Allman de The Allman Brothers Band, sus patriarcas, el rock sureño aún reflejaba fuerte influencia del blues, por ser entonces Duane, de cuya muerte, en un accidente en motocicleta, se cumple ahora medio siglo, el gran gurú del movimiento. Y eso no admite discusión. Tanto es así, que en su álbum doble (Live) At the Fillmore East, una joya publicada hace medio siglo, indispensable en cualquier colección, aparecen grandes versiones de cuatro blues, uno de ellos, una zapada que ocupa toda una cara. Sin embargo, aunque parecían hacer blues rock, como los grupos británicos, hay una diferencia fundamental: mientras los británicos intentan imitar a los bluesmen del sur, The Allman Brothers Band se están interpretando a sí mismos, con una música que generacionalmente les pertenece de la cual son sus herederos, con toda la carga implícita de sufrimientos y ante la cual reaccionan, como músicos blancos "no retrógrados" de la posguerra y del período post luchas por los derechos civiles.
Una vez superado el duelo por la muerte de Duane Allman, en octubre de 1971, hace medio siglo, The Allman Brothers Band dan un paso más adelante, al comenzar a experimentar con Jazz, pero, incluso, ya desde 1970, con Duane Allman, el grupo hizo gala de sus facultades de jam sessions (zapadas), interpretando los primeros temas experimentales con el jazz y sobre todo, con el duelo armónico entre instrumentos dobles, guitarras y baterías, para definir la estructura de lo que sería el rock sureño, por ejemplo, en Jessica y, sobre todo, en In Memory of Elizabeth Reed, como los vemos acá. Un sonido verdaderamente muy avanzado.
Uno de los motores fundamentales del rock sureño fue el sello disquero Capricorn Records, una subsidiaria de Atlantic Records, que se enfocaría en el talento del sur, así como lo hizo Motown en Detroit o Stax Records en Memphis, sin que ello signifique que todos los grupos grabaron únicamente bajo ese sello. El punto está en que Capricorn buscaba a las bandas, no las bandas al sello, grababa su material y era su principal promotor, lo que establecía una diferencia fundamental con el resto de sellos disqueros. De allí su importancia, referencia e influencia.
Para su surgimiento, el rock sureño tuvo un elemento social fundamental, el contacto interracial, blancos y negros viviendo en las mismas vecindades pobres, lo que terminó exponiéndolos, a los futuros músicos blancos de la posguerra y del período posterior a las luchas por los derechos civiles, a los elementos de la cultura negra, entre ellos la música, creando una especie de conciencia de tolerancia y convivencia, quizá empatía, con los negros, lo que sirvió para pavimentar el empedrado camino que la discriminación, el prejuicio racial, la guerra civil y la esclavitud habían construido a lo largo de generaciones.
Continuará...
